Es el día después de tu boda. Los zapatos te dan una tregua y te miran desde el rincón. El vestido descansa con los bajos sucios sobre un sofá. Te tumbas y extiendes la mano. Sonríes. Desde el anular chispea la alianza que te recuerda el baile, la familia, tu pareja. Puede ser de titanio y oro rosa, como manda la tendencia llegada de Italia, con un diamante con forma de brillante o de princesa.
En Vitoria, se encuentra esa pieza que te hará brillar en tu boda y sonreir después de ella. En Domaica Joyero asesoran a quienes confían en comprar algo más que un anillo. Se llevarán moda, estilo pero, sobre todo, podrán mirar cada día el recuerdo que mejor define la nueva vida que empiezan.